Jugando

Estos días he disfrutado de la ingenua curiosidad de mis amigos Moon y La Burbu sobre los nuevos temas del disco. No les he querido mostrar nada todavía, más por seguir el juego de la traviesa observación que de no compartir los borradores del trabajo. Sin embargo les he dicho que mi intención esta vez es la de hacer un disco menos oscuro, más ligero (de fondo, no de forma) y si fuera posible algo más dance (me gustó lo de "No me respondes"). Esto es un poco extraño y da la impresión de que los papeles se van cambiando entre Manolo y yo. Generalmente tiro mucho al dramatismo extremo, no sé si debido a la sobre-exposición-tropical-telenovelesca-destruye-neuronas de la que sigo en franca recuperación o de una tendencia natural a ser muy drama-queen. Sin embargo voy descubriendo otras facetas del trabajo y del lenguaje musical de cada uno que resultan francamente curiosas. (Tendrían que ver algunas de las notas de Manolo, muy particulares de verdad).

Lo que sí es definitivo, al menos desde mis expectativas es el querer hacer un trabajo más orientando al directo. Menos florituras (que un estudio da para mucho, baste escuchar lo último de Björk...más bien da para demasiado) y más sencillez. Obviamente, para ser barroco siempre sobra tiempo y para arrimarse a la simple contundencia del trabajo limpio hay que sudar y bastante.

Veremos dónde atraca este barco.

Dance usted

La irlandesa Róisín Murphy fue la cantante de Moloko hasta que este grupo se disolvió en 2004. En sus canciones mezcla música de baile, funk y electropop. Así a bote pronto, la imagen que da es la de una especie de Kylie Minogue vestida como Björk. Su nuevo disco, el segundo en solitario, se titula como la canción que te traigo aquí, Overpowered.